Qué es la terapia de choque para superar una ruptura amorosa

Las rupturas amorosas suelen ser un proceso complicado y doloroso para ambas partes, incluso si en conjunto se llegó a la decisión de separarse. Cada persona tiene su propio método para superar este episodio. Algunas prefieren hacerlo saliendo con amistades y manteniéndose ocupadas, mientras que otras optan por recurrir a ayuda psicológica y sus distintos tipos de técnicas y enfoques, como la terapia de choque.

Descubre en qué consiste la terapia de choque y cómo puede ayudarte a superar una ruptura amorosa.

Qué es la terapia de choque

Es importante tener presente que, aunque se le llegue a nombrar igual, la terapia de choque para superar una ruptura amorosa no es lo mismo que la terapia de electroshock utilizada en la psiquiatría. Tampoco se trata de un procedimiento que te haga olvidar todo lo que viviste con una persona, como el que se muestra en “Eterno resplandor de una mente sin recuerdos”.

Su nombre hace referencia a las sensaciones experimentadas en el proceso y alude a la conmoción que se siente cuando la separación es reciente, conocida mayormente como negación. Más que un enfoque englobado dentro de la psicología, se trata de una técnica en la que, hablando metafóricamente, se crea una especie de “shock” en el paciente, a través de un recorrido por todas las etapas de la relación.

Con esto se pretende tener un panorama realista de lo que fue el vínculo. Haciendo visible aquello que llegó a ignorarse como resultado de la idealización en la que suelen vivir muchas parejas, así como en los recuerdos que una de las partes conserva de la otra.

El objetivo es mostrarle a la persona que, pese a que en el duelo pueda parecer imposible, cuando una relación se rompe la mayoría de veces es porque hay motivos válidos para hacerlo. Es una oportunidad para observar cuáles fueron los errores que se cometieron, los aprendizajes que pueden conservarse de ellos y tener la certeza de que el rompimiento está justificado.

Lo que debes considerar antes de recurrir a la terapia de choque

1. No es una fórmula mágica. La terapia de choque no actúa como magia, nada garantiza que al terminar la sesión te sentirás completamente liberada de la tristeza o consternación. Es posible que al salir sigas teniendo anhelo o extrañando ciertas cosas, la diferencia es que ahora tendrás más herramientas para analizar toda la situación desde una perspectiva realista.
2. Debe ser dirigida por especialistas. En esta confrontación se tocan temas que pueden ser sensibles, como las discusiones o inseguridades dentro de la relación. De modo que estrictamente debe ser guiada por especialistas que brinden acompañamiento y contención en el proceso. Tu terapeuta es la única persona indicada para decirte si es factible hacerlo o si requieres de otro tipo de enfoque.
3. No es para todos. De la mano del hecho de que la terapia de choque llega a ser demasiado dura y difícil de digerir al revivir parte de los momentos que se vivieron en pareja, es indispensable tomar en cuenta nuestra salud emocional antes de pretender recurrir a esta técnica. Es probable que pacientes con ansiedad y depresión no sean candidatas por el desgaste emocional que implica.

Leer más:

Cuánto tiempo duran las relaciones amorosas, según la ciencia

‘Spider webbing’, la táctica de manipulación en relaciones de pareja

Señales de que es la persona correcta, en el momento incorrecto