Sin duda alguna, el príncipe Louis es uno de los miembros de la familia real más simpáticos por naturaleza. El hijo menor de William y Kate Middleton se ha robado la atención en numerosas ocasiones gracias a que no disimula su sentir mediante gestos y muecas.
Por esta razón, hasta hace unas semanas se especulaba aún si sería invitado a la coronación de Carlos III, o si optarían por dejarlo al cuidado de un equipo de nanas en el palacio mientras su familia asistía a la ceremonia. Finalmente acudió junto a sus hermanos, e inevitablemente se volvió la sensación debido a su comportamiento en el evento.
Príncipe Louis se convierte en el protagonista de la coronación
Esta madrugada, los ojos del mundo se situaron en Londres, donde tuvo lugar la ceremonia de coronación de Carlos III. Entre los miles de invitados y espectadores, hubo uno en específico que le robó el protagonismo al ahora rey a raíz de un curioso incidente.
Se trata del príncipe Louis, de apenas cinco años de edad, quien conquistó al público con las divertidas expresiones, muecas y gestos que hizo durante el evento. Sentado junto a su hermana Charlotte y sus padres, William y Kate Middleton, el pequeño monarca no pudo disimular su aburrimiento durante uno de los discursos recitados para el rey.
Una de las cientas de cámaras ubicadas en el lugar para documentar cada momento de este histórico evento, captó al príncipe Louis bostezando. En otra de las imágenes, se le ve tratando de entablar una conversación con su hermana Charlotte, que parecía ignorarlo para mostrarle que debía comportarse.
Redes caen rendidas ante reacciones de Louis
Las imágenes rápidamente se viralizaron y cientos de internautas replicaron las fotografías de uno de los herederos. En los comentarios predomina lo simpático que es con sus reacciones naturales y comportamiento que arranca sonrisas a los presentes.
En eventos anteriores, el príncipe Louis ya se ha vuelto el centro de todas las miradas gracias a los apuros en los que ha puesto a su mamá, Kate Middleton, al hacer berrinches o externarle su molestia sin temor al protocolo.
Gran parte de las respuestas en redes señalan la importancia de dejar que se exprese, considerando su corta edad. También se ha visto a sus padres llamarle la atención en público luego de que “sacara la lengua” o se tapara los oídos ante el abrumador sonido de los aviones utilizados en ceremonias oficiales.
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