Los postres son uno de los mayores placeres para quienes aman lo dulce, aunque la realidad es que saber prepararlos no es una tarea sencilla, sobre todo si para seguir la receta se deben seguir laboriosos pasos. El lado amable es que siempre hay una solución, o un platillo que se adapte al antojo, en este caso, el cheesecake sin horno.
Entre sus deliciosas versiones está el de fresa, con salsa de moras, de frutos rojos, de galleta, de mango o de maracuyá. Todas con la garantía de ofrecer un exquisito sabor sin tener que pasar horas en la cocina.
Te compartimos una receta para aprender a preparar cheesecake casero.
Cheesecake sin horno. Aprende a preparar este fabuloso postre con una sencilla receta
1. Ingredientes
- 3 paquetes de galletas Marías
- 4 cucharadas de mantequilla derretida
- 2 barras de queso crema
- 2 limones
- 300 gramos de la fruta de tu elección (fresas, zarzamoras, mango)
- Una lata de leche condensada
- Un sobre de grenetina
- Una lata de media crema
2. Preparación
Para la base del cheesecake sin horno
- Tritura las galletas. Ya sea que utilices la licuadora, procesador o un rodillo, procura que no queden trozos demasiado grandes.
- Agrega la mantequilla derretida, idealmente debe estar caliente, para que así se pueda manipular facilmente.
- Mezcla hasta que se incorporen ambos ingredientes por completo.
- En un molde desmontable coloca una capa de papel encerado y sobre la superficie coloca la galleta.
- Distribuye por toda la superficie. Con tus manos perfectamente limpias “aplasta” la galleta para crear una base uniforme.
Para el relleno del cheesecake sin horno
- En un bowl agrega el queso crema. Debe estar a temperatura ambiente.
- Añade la media crema, la leche condensada y el jugo de los dos limones.
- Bate suavemente y agrega de a poco la grenetina previamente hidratada con agua tibia.
- Si lo prefieres, con la batidora mezcla el relleno, o bien, con un globo de acero. Únicamente debes cuidar que no queden grumos.
Montaje del cheesecake sin horno
- Vierte el relleno sobre la base de galleta.
- Con una pala perfecciona la superficie.
- Llévalo al congelador por cuatro horas. El tiempo podría incrementar o disminuir dependiendo de la potencia de tu electrodoméstico.
- Coloca en un plato dejando la galleta en la parte de abajo.
- Decora con la fruta de tu elección. Recuerda lavarla y desinfectarla a la perfección.
Este postre es perfecto para disfrutar de algo dulce sin tener que usar obligatoriamente el horno o pasar horas lidiando con la cocina. Además, es muy versátil y puedes prepararlo de distintas maneras; reemplazando la fruta por galletas de chocolate o añadirlas a la mezcla para que esté presente en cada bocado.
Una alternativa extra es preparar una salsa de frutas con agua y azúcar refinada, para cubrir el cheesecake sin horno como si fuera un pastel, con la ventaja de que tú controlarás las cantidades.
Cuando esté listo, solo resta cortar un trozo y disfrutar con tu bebida favorita. Por su sabor refrescante queda bien como desayuno, postre o refrigerio.
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